Crioterapia

La crioterapia consiste en la aplicación de frío con fines terapéuticos. Es una de las principales modalidades de tratamiento empleadas en el manejo inmediato de lesiones agudas de tejidos blandos.

La principal acción del frío es una vasoconstrición, disminuyendo así el metabolismo basal. La forma más clásica de crioterapia es la aplicación de hielo, aunque pueden utilizarse también sprays o aparatos electromedicinales específicos. La temperatura del frío dependerá de la profundidad a la que queramos llegar.



Efectos fisiológicos del frío
  • Efecto analgésico que alivia el dolor del traumatismo así como antiinflamatorio
  • Disminuye el dolor, el espasmo muscular y la hemorragia  acelerando el proceso de recuperación de la lesión
  • Cierre de los vasos sanguíneos (vasoconstricción) que impide que llegue más sangre a esa zona disminuyendo y ralentizando el proceso inflamatorio y de propagación

La aplicación de frío está indicada en procesos inflamatorios agudos, como puede ser un esguince de tobillo en el que hay un edema, roturas musculares, tendinitis, traumatismos, contusiones, etc. provocando un efecto analgésico y antiinflamatorio. 


Las principales patologías tratadas con frío: 
  • Laceraciones y contusiones de los tejidos blandos
  • Distorsiones y estiramientos, musculares, tendinosas, ligamentosas
  • Fractura
  • Mialgia espasmos musculares

Contraindicaciones para aplicación de crioterapia

Dentro de las contraindicaciones de la crioterapia se citan un grupo de entidades que pueden escapar ante una exploración física como son:
  • La presencia de isquemia
  • El síndrome de Raynaud
  • En caso de anestesia o hipoestesia cutánea
  • Los pacientes con alergia al frío
  • La presencia de crioglobulinemia
  • Lesiones de la piel (infecciosas o a consecuencia de enfermedades crónicas)
  • Ante respuestas tensionales generadas por frío
En el siguiente enlace pueden encontrar un ejemplo de aplicación de crioterapia utilizando el aparato de New Age Cryos Card: